Reseña: Bailando con el Diablo - Sherrilyn Kenyon (Cazadores Oscuros #7 )

Sinopsis: 
Cuando la bella Astrid, la más joven de las legendarias Moiras es designada para juzgar a Zarek de Moesia todo parece que que terminará con una condena eterna entre las sombras. 
Son pocos los que saben algo de este huraño y atormentado Cazador Oscuro, un antiguo esclavo romano que vendió su alma a Artemisa, ni por qué aveces desconfía incluso de si mismo: no en vano se le acusa de un horrendo crimen contra inocentes que él que logra recordar. 
Pero la pasión que surge entre el y Astrid, desatando los instintos que más controlados creía tener, les ayudará a enfrentarse a la búsqueda de una verdad que no va a gustar a todos los que les persiguen. 





Mi opinión: 
Tenía unas ganas enormes de leer este libro, me habían dado muchas buenas opiniones y en el libro anterior de la saga, Zarek me había llamado mucho la atención y dejaba su destino con cierto suspenso. 
Es el séptimo tomo de la saga "Cazadores Oscuros" (O Dark-hunter, da lo mismo en realidad) donde Zarek, un ex esclavo romano debe ser juzgado por sus malos actos de Cazador, al incumplir el código. 
Y luego de sufrir un inesperado ataque de Thanatos, despierta en una linda casa, con una linda chica que vive sola en Alaska, con la sola compañía de un lobo. 
Y esa chica cambiaría su vida. 
Astrid debe juzgar a Zarek, de ella depende si el sigue con su exilio en Alaska, o vagar por siempre en las sombras, un lugar donde teniendo hambre y sed, pero sin poder saciarlo. 
Está historia es tan linda y tan triste, es perfecta. 
Mezcla perfectamente la estancia de Zarek junto con Astrid y los recuerdos del pasado del Cazador, mostrando el por qué de su personalidad hosca y pesada. 
El ambiente paso de Nueva Orleans a el frío Alaska, donde Zarek vive en una pequeña cabaña en medio de la nada, hace un frío de mierda, y en verano apenas puede salir veinte minutos por el sol. 
Me gusto la idea de que Astrid fuera relacionada con las Moiras, temidas por mortales tanto como por dioses, involucra fácilmente todos los aspectos de la mitología, logrando que la historia sea más sabrosa, y diferente a los otros tomos. Además, se le añade que Astrid sufre de ceguera, y es acompañada por su lobo Sasha, lo que hace que la historia tenga un tono de humor entre la conexión del lobo y Astrid, y el comportamiento que tiene el animal respecto a Zarek. 
Y bueno, con respecto a Zarek, me encantó, su historia, la manera en que escondía sus sentimientos, sus comportamiento molesto, la manera en que se comportaba con Astrid, su preocupación por ella y por los demás. Me cautivo completamente, hasta ahora es el personaje que más me ha gustado.
Y odie personalmente a Artemisa, la diosa creadora de los cazadores. La odiaba antes, pero de con este libro, es una maldita. No soy de odiar a los personajes, pero definitivamente ella se gana todo el odio que le tengo.  
Sigo muy interesada en el personaje de Acheron, aunque se que me queda un largo viaje para leer su libro, odio su especie de relación enfermiza con Artemisa, y me encanta el demonio que tiene, Simi, lo encontré muy simpático, todo lo que hablaba y ese hambre eterno que tiene, me pareció simplemente adorable. 
También me gusto la especie de batalla que se tuvo en el clímax  la mezcla entre Apolitas y Daimons; Thanatos, el dayslayer y la relación con la marca de todos los cazadores, el doble arco.
Me gusto, mucho mucho mucho. 

                          

                                                                                              Val.