Sinopsis:
Wulf es un antiguo guerrero vikingo condenado a no ser recordado por las personas que lo ven... hasta hoy. Porque después de salvar a Cassandra Peters de los vampiros de Apolo en un sensual club nocturno, ella se niega a olvidarle. Es joven, es bella, es la última de una estirpe legendaria y es su mortal enigma. Sin embargo, por ella está dispuesto a enfrentarse a una maldición de siglos.
Opinión:
Simplemente, amo a Sherrilyn, amo como escribe, el tema, todo.
Y es que, el libro es completamente perfecto, de inicio a fin.
Es de lectura rápida, te engancha desde el principio y tiene un montón de acción a lo largo de la historia.
A principios de la saga nos tenían acostumbradas a que tanto daimons como apolitas eran los malos de la historia, y que los cazadores oscuros debían cazarlos cueste lo que cueste. Y en este libro, no es así. Cassie, la protagonista, es mitad apolita, mitad humana, y debe enfrentarse a su cumpleaños número 27, el día en que sufre la dolorosa muerte apolita por la maldición de Apolo.
Mientras que Wulf, concentrado en que su único descendiente, Chris, pueda procrear y continuar con el linaje.
El libro es bastante revelador, si antes había una línea borrosa sobre lo que en realidad eran los daimons, el principio de su raza y todo lo demás, no se preocupen, porque ahora no sólo se nos explica con creces el por qué, si no que también explica que esa misma maldición encadena a Apolo y a la mismísima Artemisa.
Durante el libro, Wulf, quien al empezar a salir con Cassandra se ve obligado a conocer más sobre los apolitas y daimons, y de pronto comienza a preguntarse si de verdad es necesario cazarlos a todos sin saber su historia, lo que le da un toque diferente, porque nunca a lo largo de la saga se habían referido a los vampiros como algo que siente y que puede ser una buena persona a pesar de todo. Y me gustó bastante, porque en realidad de verdad ellos no son tan malos, o bueno algunos de ellos.
Sigo pensando que por cada libro que va pasando no hay ninguna semejanza que pueda hacer aburrida la saga, sigue teniendo el mismo magnetismo y tiene un toque adictivo que hace que te devores el libro en tan poco tiempo. Por cada página que pasa estás queriendo más, porque siempre ocurre algo y siempre hay un enigma que debe resolverse tanto en el libro como en el siguiente de la saga.
Respecto a los personajes, me gustaron bastante, sobre todo el personaje de Chris, que a pesar de sentirse presionado por Wulf y todo, era bastante sarcástico y simpático con los demás.
Sigo odiando al personaje de Artemisa, es que es tan pesada y cree que tiene que manejar a todo el mundo. Y la odio, es tan odiosa que me hace odiarla.
Cassie, la protagonista, no me gusto tanto como las otras, era un poco más llorona que las demás y quizás por eso no me sentí muy atraída a ella, pero era de lo más entendible debido al hecho de que ella esta destinada a morir a los veintisiete y no hay nada que se le pueda hacer añadiéndole claro todas las cosas que ocurren en el libro y que la hacen sentir aun peor.
Y Wulf, bueno el es completamente perfecto, y es algo así como un estabilizador de Cassie, lo que hace que sea tan tierna la pareja y me encanta. Añadiéndole también que tiene también todo lo de la historia vikinga que la autora supo manejar bastante bien, y que involucra bastante bien en el libro, y tiene toda esa cosa de hombre súper machote que me encanta y hace que la historia sea mucho más divertida.
Otra cosa que me gustó es que involucro a todos los otros personajes de los libros anteriores, y es que eso es lo mejor, porque todos los personajes me gustaron y merecen seguir apareciendo en todos los libros, y espero, de verdad espero que sigan apareciendo.
Por último ya, creo que está es una de las mejores sagas de vampiros que hay hasta ahora, no es que haya leído muchas, pero tiene la mezcla perfecta de romance, acción y comedia que un libro necesita, y sobre todo con un tema tan trillado como el de los vampiros.
Y obviamente, a continuar con está larguísima saga.
Val.
Simplemente, amo a Sherrilyn, amo como escribe, el tema, todo.
Y es que, el libro es completamente perfecto, de inicio a fin.
Es de lectura rápida, te engancha desde el principio y tiene un montón de acción a lo largo de la historia.
A principios de la saga nos tenían acostumbradas a que tanto daimons como apolitas eran los malos de la historia, y que los cazadores oscuros debían cazarlos cueste lo que cueste. Y en este libro, no es así. Cassie, la protagonista, es mitad apolita, mitad humana, y debe enfrentarse a su cumpleaños número 27, el día en que sufre la dolorosa muerte apolita por la maldición de Apolo.
Mientras que Wulf, concentrado en que su único descendiente, Chris, pueda procrear y continuar con el linaje.
El libro es bastante revelador, si antes había una línea borrosa sobre lo que en realidad eran los daimons, el principio de su raza y todo lo demás, no se preocupen, porque ahora no sólo se nos explica con creces el por qué, si no que también explica que esa misma maldición encadena a Apolo y a la mismísima Artemisa.
Durante el libro, Wulf, quien al empezar a salir con Cassandra se ve obligado a conocer más sobre los apolitas y daimons, y de pronto comienza a preguntarse si de verdad es necesario cazarlos a todos sin saber su historia, lo que le da un toque diferente, porque nunca a lo largo de la saga se habían referido a los vampiros como algo que siente y que puede ser una buena persona a pesar de todo. Y me gustó bastante, porque en realidad de verdad ellos no son tan malos, o bueno algunos de ellos.
Sigo pensando que por cada libro que va pasando no hay ninguna semejanza que pueda hacer aburrida la saga, sigue teniendo el mismo magnetismo y tiene un toque adictivo que hace que te devores el libro en tan poco tiempo. Por cada página que pasa estás queriendo más, porque siempre ocurre algo y siempre hay un enigma que debe resolverse tanto en el libro como en el siguiente de la saga.
Respecto a los personajes, me gustaron bastante, sobre todo el personaje de Chris, que a pesar de sentirse presionado por Wulf y todo, era bastante sarcástico y simpático con los demás.
Sigo odiando al personaje de Artemisa, es que es tan pesada y cree que tiene que manejar a todo el mundo. Y la odio, es tan odiosa que me hace odiarla.
Cassie, la protagonista, no me gusto tanto como las otras, era un poco más llorona que las demás y quizás por eso no me sentí muy atraída a ella, pero era de lo más entendible debido al hecho de que ella esta destinada a morir a los veintisiete y no hay nada que se le pueda hacer añadiéndole claro todas las cosas que ocurren en el libro y que la hacen sentir aun peor.
Y Wulf, bueno el es completamente perfecto, y es algo así como un estabilizador de Cassie, lo que hace que sea tan tierna la pareja y me encanta. Añadiéndole también que tiene también todo lo de la historia vikinga que la autora supo manejar bastante bien, y que involucra bastante bien en el libro, y tiene toda esa cosa de hombre súper machote que me encanta y hace que la historia sea mucho más divertida.
Otra cosa que me gustó es que involucro a todos los otros personajes de los libros anteriores, y es que eso es lo mejor, porque todos los personajes me gustaron y merecen seguir apareciendo en todos los libros, y espero, de verdad espero que sigan apareciendo.
Por último ya, creo que está es una de las mejores sagas de vampiros que hay hasta ahora, no es que haya leído muchas, pero tiene la mezcla perfecta de romance, acción y comedia que un libro necesita, y sobre todo con un tema tan trillado como el de los vampiros.
Y obviamente, a continuar con está larguísima saga.
Val.
No hay comentarios :
Publicar un comentario
¡Hoola! Gracias por visitar Cazando Historias y Letras. Comenta sin vergüenzas, recuerda que los comentarios son el alimento favorito de un blog ¡Un beso! *-*